¿Cómo mejora tu salud cuando comienzas a practicar ejercicio físico?

Muchos de los trabajos actuales conllevan unas ocho horas sentados en una silla y, aunque hay opciones para movernos en la oficina, estas jornadas son la primera parte de un sedentarismo diario. Lamentablemente, muchas personas combinan estas jornadas laborales con tardes y noches perdidas en el sofá o en las que no se realiza ningún ejercicio físico.

Como ya os indicamos en nuestro blog, el sedentarismo afecta muy negativamente a nuestra salud, llegando a ser corresponsable de enfermedades cardiovasculares, sobrepeso, depresiones… Salir de ese sedentarismo y comenzar a practicar actividad física, aunque esta sea moderada en un primer momento, conlleva beneficios para nuestra salud que se empiezan a notar a corto plazo. Hoy los desarrollamos en nuestro blog.

En primer lugar, aunque los primeros días tras una vida sedentaria pueda costar esta práctica, con el ejercicio físico notaremos mayor energía y agilidad. Aumentaremos nuestra frecuencia cardíaca y nuestro cuerpo comenzará a sentirse mejor. Tras unas pocas semanas practicando la actividad o las actividades físicas que hayamos seleccionado, percibiremos cómo nuestra resistencia también es mayor, siendo capaces de realizar sesiones de entrenamiento que nos resultaban dificultosas con facilidad. Además, notaremos también estos cambios en nuestro día a día, realizando las actividades cotidianas con mayor soltura y facilidad, eliminando el posible agotamiento que estas conllevaban.

Tras un tiempo practicando ejercicio físico notaremos los numerosos beneficios que este conlleva: aumento de la capacidad pulmonar; incremento de nuestra fuerza; mejora de nuestras articulaciones; corrección de determinados problemas posturales o musculares; mejora de la calidad del sueño, e, incluso, del estado de ánimo.

Es importante destacar que muchas personas cuando se deciden a practicar ejercicio buscan cambios físicos a muy corto plazo, deseando alcanzar la tonificación con pocas sesiones de entrenamiento. Sin embargo, los primeros efectos que percibiremos no se notan en el espejo, aunque pasados aproximadamente seis meses ya veremos cómo nuestros músculos se encuentran más fuertes y tonificados.

Eso sí, hay que tener en cuenta que el principal motivo para realizar actividad física es la mejora de nuestra salud. Si tú también llevas una vida sedentaria, no lo dudes ¡comienza a sentirte mejor con el ejercicio físico! Como siempre, te recomendamos que consultes con un profesional que te asesore a la hora de comenzar tu entrenamiento.