En nuestro blog ya os hemos hablado en otras ocasiones de algunas superficies inestables, como la fitball o el bosu. En esta ocasión en nuestro blog nos centramos en los beneficios que estos elementos aportan al entrenamiento Fitness.
Y es que seguro que os resultará muy útil conocer las ventajas que aportan estos accesorios que están al alcance de todos en las salas de Fitness y son muy sencillos de encontrar para aquellas personas que no se ejercitan en ellas.
En primer lugar, es importante definir las superficies inestables. Así, podemos afirmar que nos referimos a un conjunto de elementos que generan una sensación de inestabilidad con su uso, incrementando la necesidad de estabilización y de conocimiento del cuerpo. Dentro de ellas, nos encontramos diferentes accesorios como son la fitball, el bosu, la balance board o los discos de equilibrio.
Incluir este tipo de complementos para el ejercicio físico en nuestro entrenamiento. En primer lugar, como indicábamos a la hora de aportar su definición, las superficies inestables suponen una mejora considerable para aquellos que las utilizan en su equilibrio, su percepción de su propio cuerpo y su estabilización.
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Además, cabe destacar el trabajo del CORE si nos centramos en las zonas específicas que mejoran de manera principal. En este sentido, uno de las funciones clave de esta zona muscular es proporcionar estabilidad a nuestro cuerpo, por lo que cuando estemos trabajando con este tipo de superficies potenciaremos la fuerza de esta región central. Además, si queremos trabajar pensando aún más en la tonificación del CORE, también existe la posibilidad de realizar ejercicios abdominales específicos valiéndonos de estos elementos.
Otro de los puntos clave de las superficies inestables, es su buen resultado en lo que a recuperación de determinadas lesiones. Eso sí, siempre es fundamental que los ejercicios para este fin sean diseñados y supervisados por un profesional, para evitar posibles problemas derivados de una mala ejecución.